La Policía Nacional, en coordinación con el Ejército Nacional, asestó un importante golpe al grupo criminal ‘Comandos de Frontera’, con la captura de alias Pepo Menor, vinculado a múltiples crímenes, entre ellos asesinatos selectivos, intimidación a líderes sociales, reclutamiento forzado y tráfico de narcóticos.
La operación, denominada Themis 2.0, estuvo enfocada en neutralizar y desarticular estructuras criminales que afectan la seguridad en diversas regiones del país. El resultado fue la captura de este cabecilla del Grupo Armado Organizado Residual (GAO-r) estructura Comandos de Frontera – Ejército Bolivariano.
La acción fue posible gracias a un trabajo conjunto de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (DIJIN), el Cuerpo Élite de la Policía Nacional en Putumayo, el GAULA Militar Putumayo y la Unidad Especial de Investigación del CTI de la Fiscalía, quienes lograron materializar la captura tras más de dos años de investigación.
El operativo se desarrolló en el área urbana del municipio de Valle del Guamuez, cabecera de La Hormiga, con la participación de cerca de 20 uniformados que intervinieron de manera estratégica.
Alias Pepo Menor, de 35 años, cuenta con más de 18 años de trayectoria delictiva en grupos armados ilegales. La orden de captura fue emitida por un Juez de la República por el delito de concierto para delinquir agravado, aunque las autoridades no descartan su participación en otros crímenes como asesinatos selectivos de firmantes de paz, reclutamiento forzado, tráfico de narcóticos e intimidación a líderes sociales.
El coronel Álvaro Correa Gamba, comandante de la Policía en Putumayo, manifestó:
“Esta captura es un golpe certero contra el grupo criminal Comandos de Frontera. Gracias a la labor investigativa de nuestros hombres y mujeres, apoyados por la Fiscalía y el Ejército, logramos detener a uno de los principales responsables de una serie de crímenes que venían afectando la seguridad y el bienestar de la comunidad en el Putumayo”.
Las investigaciones señalan que Pepo Menor lideraba operaciones criminales en distintas zonas del Putumayo, dedicándose a la producción, comercialización y transporte de narcóticos, además de ejecutar acciones violentas contra la población civil y miembros de la fuerza pública. También se le atribuyen desplazamientos forzados y violaciones a los derechos humanos de excombatientes que firmaron el Acuerdo de Paz en 2016.
La Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación reafirmaron su compromiso de continuar trabajando articuladamente para lograr la judicialización de otros integrantes del GAO-r ‘Comandos de Frontera’ y garantizar justicia a las víctimas de sus crímenes.